viernes, 30 de noviembre de 2007

MENSAJE DE LA VIRGEN MARIA VENEZUELA

Mensaje de la Virgen, bajo la advocación de María de Lourdes, para Venezuela. Recibido el 24/11/2007. 11:30 p.m.

“Soy yo, hijita santa, tu Madre, María de Lourdes, la que una vez te tomó en sus brazos para que depositaras en mi la carga de tus pecados. Aquí estoy yo, hijita, tu Madre, tu maestra, la que ha hecho todo por llevarte a Cristo, el Amigo Fiel, el Padre Bondadoso, hecho carne por su absoluta omnipotencia y su grande amor a todas las criaturas de su creación. Soy yo, hija, la Madre Santa del Hijo Amado, del Rey del Mundo, quién te habla, la Reina de los Pueblos. Y soy yo, hija, tu Madre, quién te habla. Tu destino desde hoy queda irremediablemente unido a la Santa Voluntad de mi Hijo, que es la del Padre, pues el mismo te escogió el día que naciste, hija, y aunque muchos años pasaron para ti, para nosotros fue un segundo esperarte, pues poseemos la eternidad, y mi Hijo quiere que tú también la poseas, hijita, pero trabajarás duro por ella (…) Mi Amado Jesús ha querido que seas mediadora pacífica, receptáculo repartidor de la paz de Dios. Y no creas, hija, que has sido creada sin intención o propósito alguno en esta vida, hija, pues en tus manos está unificar a tu país después del desastre que intentará provocar el dragón rojo. Mis hijos han trabajado duro para presentarle su súplica al Padre, hijita, y el Padre todo lo oye y todo lo ve, y responde. Hija, a ti te respondo en nombre del Padre Bueno: ¡haz llegar esta oración junto con una estampita de mi Inmaculado Corazón, hija! ¡Su Llama de Amor puede cegar a satán, que ya casi los tiene tomados! Hija mía, confía, soy Yo quién te hablo.

En tus manos, Padre, encomiendo mi espíritu. Jesús, mi Señor y Redentor, a ti encomiendo mi cuerpo, pues Tú entregaste el tuyo en salvación del mío. Hoy yo entrego, Señor, mi fuerza, mi voluntad, mi energía, mi lucha, en nombre de mi país, sus habitantes, mi familia y mis amigos. Te pido, Señor, que me escuches, pues en tus manos pongo mi súplica. Vos dijisteis, Padre: “Pedid y se os dará”. Hoy yo te pido con fe, que por la Santa Gracia que otorgaste al Inmaculado y Doloroso Corazón de mi Madre María, seas capaz de librarme de toda asechanza y ataque del maligno mientras defiendo a mi país y a la Iglesia de sus ataques. Jesús, yo entrego mi lucha como Tú entregaste Tu Cuerpo, protégeme de todo mal bajo la Santa Protección del Inmaculado Corazón de María. Amén. En el Nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Hela aquí, hijita, la oración del Padre para sus hijos que luchan por su país y por la Iglesia. Se lucha rezando, hijita, pues lo que se pide se concede. La lucha es rezando, no golpeando. El señor defiende al oprimido y oprime al injusto. Ténganlo en mente. Gracias por venir, mi santa. Te amo, chiquita. Un beso santo y mi bendición. Los amo. Te amo.”
Mensaje de la Virgen, bajo la advocación de María de Coromoto, para Venezuela. Recibido el día 16/11/2007. 11:21 p.m.

“¡Hijita Santa! Mucho tiempo sin oírte… Yo también estoy muy triste, hija, mis hijos se están matando, se están odiando, se están preparando para una lucha a muerte que entre ellos no va a venir, pues todos sois hermanos. Hija, es mi deseo que hagas público este mensaje, y no has de temer, pues soy yo, María de Coromoto, quién habla a través de tus manos:

‘¡Hijitos míos! ¡Tengan compasión del corazón de una madre, que se parte de dolor al verlos enfrentados! ¡Tened compasión de Mí, hijos, y de vuestro Padre que tanto los ama! No bajéis la cabeza ante la maldad del dragón rojo. El dinero es pasajero en esta vida, pero las buenas acciones son eternas en la otra. Escuchad el mensaje que les dejo y que me ha enviado el Padre Bueno a darles: Sucederá antes de tres lunas, y el que una vez cayó, oprimió y fue levantado, será arrojado al abismo de las tinieblas en las cuales sumió a otros, seres de luz, mis hijos también. Sepa que aquel que reniega de sus padres para buscar otros amos que le den poder, abandona la pureza y la inocencia que le quedaba, y su alma manchada, corrupta, no será admitida en el Reino de los Justos, porque este pertenece solo a quién valoró su alma más que las baratijas terrenales. Sepan mis hijos que sucederá antes de tres lunas, y el que una vez cayó, ya no volverá, y se levantarán las tinieblas, y quedará bajo la luz todo aquello que la sombra tenía oculto. Y llegará la hora de un cambio. Venezuela será consagrada a mi Inmaculado Corazón…’

Y sin embargo, mis hijos que tanto rogaron seguirán negando el Poder de Dios. Y no importará, pues el Padre es Santo, y enviará otra señal que mueva a los puros a la conversión, pues duros tiempos se acercan, hija, muy duros. El pueblo ha de rezar el rosario durante las tres lunas, para evitar derramamiento de sangre y profanación de los templos bajo las órdenes del demonio rojo, hija, yo soy Madre y sufro. No me niegues este favor. Ayúdame, hija, es demasiado para soportar. Difunde el mensaje que he venido a anunciarte bajo las órdenes de Dios. ¡Ay, hijita! ¡Cuánto sufro! ¡Reparación, penitencia, unión, paz! ¡Paz! Te amo, hija, te amo. Un beso santo y mi bendición.”
ORACION PARA LOS QUE LUCHAN POR EL PAÍS Y LA IGLESIA

EN TUS MANOS, PADRE ENCOMIENDO MI ESPIRITU. JESÚS, MI SEÑOR Y REDENTOR, A TI ENCOMIENDO MI CUERPO, PUES TU ENTREGASTE EL TUYO EN SALVACIÓN DEL MIO. HOY YO ENTREGO, SEÑOR MI FUERZA, MI VOLUNTAD, MI ENERGIA, MI LUCHA, EN NOMBRE DE MI PAIS, SUS HABITANTES, MI FAMILIA Y AMIGOS. TE PIDO, SEÑOR, QUE ME ESCUCHES, PUES EN TUS MANOS PONGO MI SUPLICA. VOS DIJISTES, PADRE: “PEDID Y SE OS DARÁ”. HOY YO TE PIDO CON FE, QUE POR LA SANTA GRACIA QUE OTORGASTE AL INMACULADO Y DOLOROSO CORAZÓN DE MI MADRE MARÍA, SEAS CAPAZ DE LIBRARME DE TODA ACECHANZA Y ATAQUE DEL MALIGNO MIENTRAS DEFIENDO A MI PAIS, Y A LA IGLESIA, DE SUS ATAQUES. JESÚS, YO ENTREGO MI LUCHA COMO TU ENTREGASTE TU CUERPO, PROTÉGEME DE TODO MAL BAJO LA PROTECCION DEL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA, AMÉN.

EN EL NOMBRE DEL PADRE, Y DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO.